Publisher's Synopsis
El abismo no está vacío ni muerto. Una vida tenebrosa e impenetrable para cualquier conciencia humana sana anima las fuentes más ancestrales del horror. Nosotros no podemos llegar a esas entidades, pero ellas sí se aventuran en nuestro mundo en busca de almas de las cuales alimentarse. Toman las apariencias más dulces e inocentes: una cariñosa abuela, por ejemplo. Una anciana que organiza un taller literario donde todos aquellos que quieren ser felices, verter sus sentimientos, emociones e historias en una página en blanco, son acogidos en un ambiente agradable, culto y refinado. Allí llega Berenice. Acaba de sufrir una fuerte decepción amorosa. El recuerdo de la infidelidad de su novio la atormenta. Sin embargo, a medida que empieza a escribir el dolor cede. Cree haber recuperado la felicidad. Ignora la joven que cada letra es un signo que puede ser manipulado, y en los signos hay una parte del alma de aquella que lo plasmó. No se pueden entregar nuestros escritos tan fácilmente a una señora con apariencia amable, educada y tan culta que puede convertir a una mujer con talento suficiente en una hábil escritora. No, no se debe confiar tanto. Detrás de unos labios que sonríen puede estar oculta una maldad más antigua que este planeta que habitamos. Seres ancestrales y oscuros vigilan nuestras letras para atraparlas y, desde ellas, extender las cadenas con las que nos esclavizarán y nos sumergirán en las tinieblas perpetuas. ¿Podrá escapar Berenice, la protagonista de esta novela, de tan cruel destino?