Publisher's Synopsis
Todos experimentamos durante los periodos de confinamiento, ocasionados por la cuarentena derivada del Covid -19, la necesidad de mejorar nuestra experiencia en la interacción con los medios digitales disponibles, independientemente de la edad, condición social, ocupación o sector económico. El encuentro con las pantallas en el 2020 selló el inicio de la tercera década del nuevo milenio, puso a prueba a nativos y migrantes digitales, así como las opciones de interacción social para enfrentar las derivaciones de una pandemia global.El mundo se detuvo, lo que en las últimas décadas del siglo XX sirvió de antesala para la interconexión de la aldea global, se disparó como un recurso de primera necesidad, la conexión o acceso a la internet fue la caja de pandora, tanto que hoy, sin darnos cuenta aceleró las brechas entre ricos y pobres, amplió la divergencia generacional entre los que usan las tecnologías digitales como recurso básico, bien suntuario, espacio de ocio, canal transaccional o entorno para incrementar el capital, iniciar o cerrar espacios locativos.