Publisher's Synopsis
DIOS ES EL CULPABLE
FINALMENTE, EL CULPABLE EN EL BANQUILLO
Una conversación honesta entre el dolor humano y la esperanza divina
Por Ramón Rodríguez A.
¿Dónde estabas, Dios, cuando todo se rompía?
Tal vez no lo gritaste con palabras, pero sí con tus silencios.
Con tu llanto. Con tu rabia.
en ese instante en que el alma ya no busca explicaciones...
sino consuelo. Dios es el Culpable no es una predicación disfrazada de páginas.
No es otra obra religiosa más. Es una conversación cruda y real,
con olor a lágrimas secas y cicatrices que aún arden.
Es el grito sordo que muchos callan.
La herida que nadie se atreve a mostrar.
La confesión que alguna vez pensaste... pero nunca dijiste en voz alta. Aquí no hay santos.
Hay personas rotas.
Y un juicio simbólico donde el principal acusado... es Dios. ¿Por qué el dolor?
¿Por qué la pérdida?
¿Por qué el silencio del cielo cuando más necesitábamos una respuesta?
Este libro te acompaña a caminar por ese tribunal interior
donde muchos hemos sentado a Dios en el banquillo de los acusados...
para, finalmente, descubrir algo mucho más profundo: Que no es Él el culpable... sino el único que ha estado ahí todo el tiempo, llorando contigo. ¿Este libro es para ti?
"Dios me falló."
"Estoy cansado de orar y no ver nada."
"No soy digno."
"Si Dios existiera, esto no me habría pasado..." También es para ti si:
✔️ La religión te hirió, te juzgó o te cerró la puerta.
✔️ Te cuesta creer... pero no puedes dejar de buscar.
✔️ Sientes que nadie entiende tu dolor... ni siquiera el cielo. ¿Qué encontrarás en estas páginas?
✔️ Historias reales, vulnerables y sin maquillaje.
✔️ Reflexiones que confrontan sin condenar.
✔️ Un lenguaje claro, cercano, sin dogmas ni adornos.
✔️ Una fe sin filtro, que no huye del dolor... lo abraza. Sobre el autor
Ramón Rodríguez A. no escribe desde el púlpito, sino desde el polvo del camino.
No firma como teólogo, sino como testigo de primera línea
del dolor humano y del amor divino. Cayó. Gritó. Dudó.
Pero fue levantado...
y por eso escribe. Esta obra no es solo un libro.
Es parte de su historia...
y quizá, también será parte de la tuya. No es religión. Es redención.
No es doctrina. Es testimonio.
No es culpa. Es liberación. "Te garantizo que si te atreves a leerlo, puede que no salgas igual...
Y eso, querido lector, ya sería un milagro."